Está increíble. Super cremoso, riquísimo de sabor, no demasiado fuerte de café ni de cacao y con un toque de ron... Tuve que obligar a mi hermano para que se lo acabase en dos días, porque yo sólo me concedí una ración, y era una tentación demasiado grande para tener en casa. Espero que la probéis porque merece la pena, pero a no ser que tengáis una fuerza de voluntad de hierro os recomiendo que hagáis media receta. Yo lo he advertido.
Espolvoreamos el molde con cacao puro.
Mezclamos el café y el ron y bañamos los bizcochos.
Formamos una capa con los bizcochos bien empapados en el cafe.
Batimos las yemas con el azúcar. Añadimos la leche y programamos 10 minutos, 90º, velocidad 3. Si no tenemos thermomix, lo hacemos en un cazo hasta que espese la mezcla, dejamos que hierva flojito 1 minuto sin dejar de remover y retiramos del fuego. Refrigerar en la nevera al menos durante una hora.
Mezclamos el mascarpone con la mezcla de las yemas.
Le añadimos a mano la nata montada con la vainilla, para que no se baje.
Y extendemos la mitad de la mezcla sobre los bizcochos. Espolvoreamos con cacao y repetimos estas dos capas.
Refrigeramos al menos 12 horas (mejor dos días). Espolvoreamos con cacao justo antes de servirlo, para que no se empape y quede feo.
INGREDIENTES (12/16 raciones de 414/310 calorías):
- 6 yemas de huevo tamaño XL.
- 150 gr de azúcar blanco.
- 160 ml de leche.
- 295 ml de nata para montar.
- Ingrediente 41/2 cucharadita de extracto de vainilla.
- 500 gr de queso mascarpone.
- 1/2 taza de café sólo.
- 1 chorrito de ron (+ o - 4 cucharadas).
- 1/2 bolsa de bizcochos al huevo de mercadona ( unos 200 gr., es una bolsa amarilla)
- Cacao puro desgrasado sin azúcar, para espolvorear.
PREPARACIÓN:
- Batimos las yemas con el azúcar. Añadimos la leche y programamos 10 minutos, 90º, velocidad 3. Si no tenemos thermomix, lo hacemos en un cazo hasta que espese la mezcla, dejamos que hierva flojito 1 minuto sin dejar de remover y retiramos del fuego. Refrigerar en la nevera al menos durante una hora.
- Montar la nata con la vainilla.
- Mezclar el mascarpone con la mezcla de las yemas, batiendo bien para que no queden grumos.
- Espolvorear el molde con un poco de caco en polvo.
- Mezclar el ron y el café. Bañamos los bizcochos en la mezcla y vamos haciendo una capa sobre el cacao.
- Mezclar la nata y la crema de mascarpone a mano, con movimientos envolventes para que no baje.
- Extender la mitad de la mezcla sobre los bizcochos, espolvorear con cacao y repetir ambas capas.
- Dejamos que repose en la nevera al menos 12 horas pero lo mejor es tomarla dos días después.
- Espolvoreamos con caco justo antes de servir, ya que si lo hacemos antes se quedará húmedo y no queda tan bonito.
Bueno, es mi oficialmente mi nueva adicción, así que espero que os guste tanto como a mi, ¡que me ha chiflado!
Qué rico, Tere. Tiene una pinta impresionante. Me puedes decir cuánto sabe a café...? Es que no me gusta cuando sabe mucho, pero si apenas se nota... :P
ResponderEliminar¡Un besoteee!
No, se nota un poco pero se mezcla muy bien con los otros sabores así que no te sabe a café. ..
ResponderEliminar