11.3.14

Puré de patatas al ajo

¿¡Veintidós dientes de ajo!? Sí, lo habéis entendido bien... Pero, no os preocupéis, que no tendréis que usar mascarilla después de ésto, ni nada parecido. ¿El truco? Que vamos a asarlos en su propia piel y perderán la sustancia que hace tan fuerte el sabor del ajo, que por cierto se llama alicina, y se pierde al cocinarlo, pero sin perder su estupendo sabor. Al asarlo, conseguimos una pasta melosa, de sabor más suave, pero intenso, que no repite, y que a mi, me encanta usar para diversas cosas. Para frotar el pan antes de gratinarlo, con queso por encima, es estupendo, por ejemplo... pero, como más me gusta, es en esta receta.
 El puré de patatas al ajo es tan rico que os aconsejo que no os compliquéis mucho con el ingrediente principal del plato al que acompañe, ya que el puré será el protagonista de todos modos. Así que un pollo asado o una carne sencillita sería lo ideal para ser acompañado por este puré. Otro consejo: no hagáis poco, porque no podréis parar de comerlo. ¡Jajaja!


 Lo primero es tostar los dientes de ajo enteros, con su piel, a fuego medio bajo, y tapados, unos 20 minutos. Les damos la vuelta a la mitad del tiempo, para que no se nos hagan sólo por un lado, ya que se nos quemarían y eso le da un sabor amargo. Apagamos y los dejamos así hasta que pierdan el calor.

 Los pelamos y retiramos con un cuchillo el extremo leñoso y alguna parte que se haya quemado.

 Lo trituramos todo con la batidora o con un mortero.

 Añadimos la leche, la nata, la sal y la pimienta.

 Y lo trituramos todo para hacer un puré.

 Cocemos las patatas,con piel, hasta que, al introducir un cuchillo, no encontremos resistencia al pinchar y, al levantar el cuchillo, se desprenda sola la patata. Pelamos todas, aún calientes, sujetándolas con un tenedor, como si fueran un polo, con la mano izquierda y pelando con un cuchillo, con la mano derecha. (Así, no nos quemamos tanto).
Es importante hacerlo cuando la patata aún esté caliente, porque el almidón en su interior está en estado líquido y evaporándose (por eso vemos vapor saliendo de la patata). Ésto hace que la piel se desprenda mejor, y que la patata se impregne mejor de los sabores de la mantequilla y la crema de ajo.
 Chafamos la patata o la pasamos por un molinillo con agujero grande para que se noten los trocitos. No queremos que se pierda del todo la patata y parezca un puré de sobre...


Le echamos la mantequilla fundida y el puré de ajo y mezclamos sin deshacer del todo la patata. ¡Y listo!

INGREDIENTES:

  • 1 Kg de patatas para cocer.
  • 22 dientes de ajo.
  • 1/2 taza de leche.
  • 1/2 taza de nata.
  • 1/2 paquete de mantequilla fundida (unos 125gr).
  • 1 poco de pimienta negra al gusto.
  • 1 cucharadita y media de sal.

PREPARACION:

  1. Tostar los dientes de ajo enteros, con su piel, a fuego medio bajo, y tapados, unos 20 minutos. Darles la vuelta a la mitad del tiempo, para que no se hagan sólo por un lado, ya que se quemarían y eso le da un sabor amargo. Apagamos y los dejamos así hasta que pierdan el calor.
  2. Cocer las patatas con la piel, cubiertas de agua con sal, unos 30 minutos, hasta que, al introducir un cuchillo, no se encuentre resistencia al pinchar y, al levantar el cuchillo, se desprenda sola la patata. Pelar todas, aún calientes, sujetándolas con un tenedor, como si fueran un polo, con la mano izquierda y pelando con un cuchillo, con la mano derecha. (Así, no nos quemamos tanto).
    Es importante hacerlo cuando la patata aún esté caliente, porque el almidón en su interior está en estado líquido y evaporándose (por eso vemos vapor saliendo de la patata). Ésto hace que la piel se desprenda mejor, y que la patata se impregne mejor de los sabores de la mantequilla y la crema de ajo.
     Chafar la patata o la pasarla por un molinillo, con agujero grande, para que se noten los trocitos.
  3. Pelar los ajos, quitando el extremo leñoso y triturarlo todo para hacer una pasta. Puede usarse la batidora o un mortero.
  4. Añadir al ajo la leche, la nata, la sal y la pimienta y batir para hacer un puré.
  5. Derretir la mantequilla y añadir a las patatas. Remover para que se incorpore bien, con una espátula
  6. Añadir la crema de ajo y remover sin chafar de l todo la patata.

¡Y listo! Lleva más tiempo que hacer un puré de sobre pero está riquísimo y no podréis dejar de comerlo... Así que merece la pena cada minuto empleado en hacer este puré de patatas. Espero que os guste.

2 comentarios :